Desde que comenzó el gobierno financiero-neoliberal de MMacri el oficialismo instaló la posibilidad de reprimir la protesta social. El protocolo anti-piquetes fue el marco institucional para dar un mensaje a los sindicatos y organizaciones sociales que ejercieran su legítimo derecho a reclamar y defender sus derechos.
Hoy volvimos a ver como el gobierno de MMacri y sus fuerzas de seguridad pasaban del papel a los hechos, reprimiendo sin justificación y de forma brutal a organizaciones sociales que protestaban frente al Ministerio de Desarrollo Social de Nación en la 9 de Julio.
Los reclamos son exigir la baja de las pensiones por discapacidad, exigir un plan de obra pública cooperativa, declarar la emergencia alimentaria y la emergencia tarifaria en fábricas recuperadas, comedores y clubes de barrio. Todos reclamos válidos y que tienen relación con la realidad que se vive hoy en los barrios de todo el país por las políticas de ajuste y endeudamiento del gobierno.
Hoy más que nunca necesitamos que el pueblo organizado consolide la unidad en la calle, colectivamente, luchando contra el neoliberalismo y defendiendo lo conquistado.
¡UNIDAD, LUCHA Y ORGANIZACIÓN!